Desde este martes, el Valle de Uco se quedará sin casinos por una decisión del gobierno de Mendoza, en tanto que los que funcionan en Tunuyán y Tupungato dejarán de abrir sus salas a partir de mayo. La medida obedece a que el juego generó, en esas localidades rurales, una fuerte pérdida de los salarios de los pobladores y la ludopatía creció en manera desmedida.
La presidenta del Instituto de Juegos y Casinos, Josefina Canale, dijo a que este tipo de entretenimiento “generó un impacto muy negativo en esos lugares”.
“El dinero que se lleva el casino es dinero de la zona que no es volcado al comercio ni a las inversiones”, señaló.
“Comenzó para combatir el juego ilegal, los juegos que se dan son los dados y las cartas y esas actividades no se realizan en los casinos públicos, por eso no sirvió”, indicó.
Por otra parte, cuestionó: “Lo que hemos hecho es crear nuevos jugadores sin darles la asistencia”.
En este sentido, se espera que en 2019 también cierre el casino de San Rafael, a quien no se le renovará el contrato.
Cadena 3